Cada vez más empresas se dedican a la investigación, el desarrollo y la distribución de productos en el campo de la ciencia. Esto hace que se recurra más frecuentemente a los servicios de traducción porque, en un mundo tan globalizado como en el que vivimos, es frecuente que lo que se investiga y desarrolla en un país acabe llegando a prácticamente todo el mundo.
Hoy traemos cinco errores de traducción que evitarás si acudes a un profesional especializado. Especialmente si hablamos del campo de la ciencia, cualquier error, por pequeño que sea, puede ser fatal. Y precisamente por eso es importante contar con los mejores servicios de traducción especializada posibles.
Cinco errores que evitarás si acudes a profesionales de la traducción científica
Si trabajas en el campo de la ciencia y quieres tener proyección internacional, contar con unos buenos servicios de traducción científica será vital. Si no tienes claro por qué, hoy te traemos 5 errores que únicamente podrás evitar si recurres a unos servicios de traducción especializados en este campo.
1. Errores lingüísticos
En las traducciones científicas es muy importante contar con profesionales capaces de entender la terminología utilizada para que no haya errores desde un punto de vista lingüístico. El traductor deberá comprender perfectamente la materia, lo que le permitirá evitar traducciones que puedan dar lugar a errores. Por ejemplo, suele ser habitual cometer errores a la hora de utilizar tecnicismos, fórmulas, neologismos o abreviaturas.
2. Frases complejas y largas
En este tipo de textos es muy común que se utilicen frases demasiado largas que dificultan la comprensión, sobre todo si se trasladan al español. Por supuesto, esto no ocurrirá si recurres a unos servicios de traducción científica especializados y de calidad. Las publicaciones de carácter científico deben ser textos concisos y limpios, ya que esto facilita la comprensión del contenido.
3. Errores de conversión
En los textos científicos es habitual utilizar diferentes unidades de medida, lo que puede convertirse en un problema grave a la hora de traducir. Además, los números se escriben de manera diferente según el idioma, algo que cobra especial importancia en estos contextos: ¡cambiar una coma por un punto o un espacio puede resultar en disoluciones totalmente diferentes!
4. Falta de contextualización
El contexto es un factor importante en toda traducción científica, ya que hace que el texto sea más sencillo de comprender para el público al que se dirige. Es decir, no se puede traducir de la misma forma un texto dirigido a un colectivo del ámbito científico que uno dirigido al ámbito educativo o a un público más amplio.
5. Conocimientos desactualizados
El último error que puedes evitar tiene que ver con el hecho de que un traductor especializado recibe una formación continua. Esto hace que sus conocimientos estén siempre actualizados y así pueda garantizar que la traducción sea adecuada. ¡En este campo se revisan y actualizan textos anteriores constantemente, así que es imprescindible contar con un lingüista que identifique descuidos también en el texto original (y que traduzca según los hallazgos actuales)!